He comenzado por el Bullring porque es espectacular, pero no comenzó así nuestro viaje. Lo primero que hicimos fue dejar el hotel, realmente trendy y dirigirnos a otro centro comercial, el Mailbox , mucho más pequeño que el Bullring pero que tiene el encanto de situarse en una esquina con acceso a los tres canales de agua de la ciudad. Cerca del Mailbox están construyendo a todo meter el Cube, un edificio con forma de cubo en el que me llamaron la atención las bolsas de restos de la construcción flotando en el río amarradas con cuerdas.
Una vez en el bullring después de comer (pasad del sitio de las baguettes si alguna vez vais, porque el bocata con jamón tiene como mucho 30gr de jamón) e iros al food court que hay unos sitios chinos, japoneses e indios que deben ser realmente buenos, porque la cola los rodeaba. También aprovechamos que estábamos aquí en el centro para comprar un adaptador EURO-UK para poder conectar los portátiles a la red en el aeropuerto. El adaptador lo compramos en el famoso y mundial mercado de Birmingham. Algo parecido a la piedra pero en cutre, con 100 puestos que se parecían todos los unos a los otros y que de ofertas no tenían mucho. Aún así el adaptador comprado aquí se vendia por 5x su precio en el aeropuerto (de 1.50 a 7.5) lo cual es una buena diferencia.
En el aeropuerto de Birmingham de nuevo (otra vez en la línea 900 aunque sin pérdida esta vez para localizar la salida) nos pusimos al día con el blog , intentamos hackear alguna de las 100 redes de pago sin resultados inicialmente aunque tras localizar un router abierto pudimos navegar. En la zona de embarque se nos dio por coger una conexión de internet por una hora. Aquí no había nada que hacer para hackear ninguna red y tuvimos que hacer como todos los mortales y pagar.
Una vez pasamos la zona de embarque nos dimos cuenta que hay detalles que hacen de Emirates una gran compañía. En la zona de espera antes de entrar en el finger del avión tienen un kiosko con 10 periódicos y 10 revistas de las cuales puedes coger las que quieras para que se te haga ameno el viaje. Entre el personal del avión tripulantes de todas las nacionalidades, hablaban al menos nueve idiomas, entre ellos una brasileña con la que cruzamos unas palabras en portugués. Las chicas todas muy jóvenes y muy guapas, totalmente uniformadas estilo asiático, pero clásico y excesivamente pintadas...
Otro de los detalles que diferencian a Emirates de otras compañías con las que hemos volado es que no paran de traerte cosas. Primero que si un tentempié, después la comida (cuatro platos incluidas dos ensaladas, un postre genial de toffe de vainilla y café y un pollo a la barbacoa que era para chuparse los dedos), a mayores unos bombones, las bebidas que te puedas tomar y de paso jugar al sistema de entretenimiento en vuelo (una pantalla personal e individual táctil que te permite tanto ver lo que ve el piloto del cielo en cabina o lo que se ve desde la cola, como 100 videojuegos de los clásicos y 20 canales de vídeo pasando películas actuales). Así es casi imposible que un vuelo sea aburrido y de paso que te veías una película, toma, galletitas de chocolate. A las 5 de la mañana, faltando 1 hora para llegar nos dieron el desayuno. Vamos , que nos pasamos las 12 horas del vuelo comiendo sin parar.
Al llegar a Dubai, lo primero que llama la atención es el petróleo, pasar por encima del golfo pérsico es un espectáculo, un montón de barcos petroleros transportando el crudo e incluso recogiéndolo de la superficie (unas lapas de petróleo que dejan en mancha de aceite la desgracia del Prestige). Acercándote a la costa de Dubai también llama la atención el skyline de la ciudad, decenas de rascacielos con estructuras cristalinas que brillaban al sol del amanecer. Además de las que ya estaban preparadas se podían ver un gran número de ellas en construcción. Se nota que es un nuevo destino turístico...Llegando al aeropuerto su terminal, parece un Shai Ulud (uno de los gusanos de Dune) con un montón increible de aviones conectados a los fingers. En total parecía haber más de 100 aviones en la pista. Y de ellos al menos 75 serían de Emirates. El aeropuerto parece ser de Emirates con el gran número de aviones y de edificios que tienen.
El resto de Dubai lo dejamos para el siguiente post.
El lugar: Primera planta Terminal 1 de salida, entre la tienda de zapatos y la de maletas, hay un router Belkin ofreciendo WIFI gratis.
La fenómena : Una chica muy mona que se pasó todo el vuelo, 12 horas, de cháchara con las azafatas de vuelo, de paseo por la zona rica y que por un momento me recordó a DiCaprio en Agárrame si puedes.
El dato: Sobrevolamos no una , si no dos zonas de guerra: Irak e Irán (se agradece poder ver por donde pasa el avión en la pantalla táctil).
Birmingham – Dubai
1 comentario:
Ah guay, y en vez de poner fotos de la chica "muy mona" subis fotos de vacas y un río menos limpio que el sumario del caso malaya.
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