miércoles, 30 de julio de 2008

DIA 37 : Bali


Dia de playa , Jimbaran Beach de nuevo. De todo lo que hay en Bali es la mejor playa para nuestro gusto. Eso sí , hoy había muchas más olas que el otro día que vinimos. Llegamos a eso de las 10 y ya estaban un nuevo grupo de rusos aprendiendo a hacer surf. Desde luego los rusos la tienen tomada con Bali.
Seguimos dándole a la crema de factor 50 aunque hay gente como Meli que ya prefiere directamente quedarse a la rica sombra en vez de chupando solazo.

Hemos estado 3 horas entre chapuzón y toalla y chapuzón y nos hemos acercado a las barbacoas de pie de playa a darnos un atracón de marisco.
Entre los distintos puestos había bastante diferencia de precios aunque el menu solía ser el mismo.En nuestro caso fue una parrillada de marisco compuesta de langostinos, langosta, cangrejo, calamar y un pescado. De todo, lo más sabroso era el cangrejo y el pescado que estaba muy pero que muy rico. Además lo acompañan de bebida , ensalada y patatas fritas. El precio para una parrillada de marisco de 2 personas fue 175000Rp (12€). El equivalente en Kuta por ejemplo habría sido cercano al doble y en Kuta lo anuncian como marisco de Jimbaran Beach. Así que teniendo en cuenta el coste del transporte sale incluso más a cuenta irse a la playa y disfrutar de un buen día de sol.


Al acabar de comer pensábamos volver a la playa pero el tiempo había cambiado y estaba cubierto así que decidimos acercarnos al hotel a pasar nuestras últimas horas juntos (mañana salen Rafa y Meli en dirección a Vigo) y a descansar un rato.

martes, 29 de julio de 2008

DIA 36 : Bali


No hay mucho que contar en el día de hoy.

Compras, playa y compras.

Comida en el Solaria con cabreo de Meli incorporado porque se equivocaron o nos equivocamos con su plato. El tema fue que pedimos unos platos , uno de ellos repetidos. Aquí tienen un sistema un poco estúpido, la carta que te dan está en inglés pero en la que anotas el plato que quieres está en indonesio, con lo cual la camarera ve lo que tu le indicas en una carta y te indica cual es en la hoja de notas para que tu apuntes. Claro, así no es díficil que ella se equivoque, si a eso le añades que pedimos los dos el mismo plato y que nosotros en cuanto lo vimos dimos buena cuenta de él , pues normal que pasen cosas como estas.

Por cierto, que en la foto podéis ver el addon que le ponen a las motos aquí para llevar las tablas de surf. Imaginaros algo semejante en España, sería impensable.

Y también este día aprovechamos para grabar un video de conducción por Bali para que veáis las cafradas que pueden llegar a hacer.

lunes, 28 de julio de 2008

DIA 35 : Bali

De vuelta de Lombok y las islas Gili. El viaje desde Trawangan con Perama es eterno, para futuras referencias , pasad de él. Te hacen levantarte a las 6 de la mañana, embarcas hasta el muelle de Lombok donde te conducen en un autobus al muelle principal donde tomas un ferry más grande que tarda 5 horas en recorrer la distancia que al avión le lleva 20 minutos y finalmente te hacen esperar en el puerto a que venga otro autobus para un total de 8h30m. Vamos, que salvo que quieras eternizarte lo evites.
Nos levantamos a las 6 para salir del hotel y ver que no había nadie que nos pudiera cobrar, eso sí estaban el de seguridad y varios empleados del restaurante a los que presionamos para que localizaran a la cajera a riesgo de quedarse sin cobrar. El de seguridad acabó cogiendo la bici y acercándose a casa de la cajera que vino 10 minutos antes de su entrada. Le pagamos y nos fuimos al muelle donde nos cogieron los datos y nos montamos en el barco. Si lo comparamos con el ferry público está mejor porque lo tienen tapado pero sigue tardando casi 1 hora en recorrer los 10 kilómetros. Desde el muelle de Bangsal tomamos el autobus de Perama tras ser acosados por un niño que quería que nos montaramos en un Cidomo (el carro a caballos) a costa de 1000Rp de comisión. Luego , como no le hicimos ni caso nos perseguía para ver si le dábamos dinero y era un auténtico pesado. Pasamos de él y nos montamos en el bus que era una antigualla con los fusibles al aire y que tenía que tomar numerosas cuestas en primera. Después de darnos el paseo por toda la costa de Lombok (no se atreven a meter este bus por el centro como hacen los taxis) y de ver cosas como niños jugando al futbol descalzos mientras las vacas campan en el terreno de juego tomamos el barco de Perama. El ferry es de madera, con un motor de la época de la polca y lo mejor que tiene es que en la cubierta superior , detrás del puente, tienen arena de playa y esterillas para tumbarse a tomar el sol, que fue lo que hicimos.
Durante el trayecto te sirven desayuno y comida, ambos básicos y de baja calidad pero la fruta siempre es buena. Tras el trayecto en el cual discutí con una alemana si lo que teníamos bajo nuestros traseros era arena de playa o de gato (triunfó lo de playa por los restos de coral que había) nos dejaron en el puerto de Bali , esperando un buen rato mientras nos asediaban los vendedores (casi estoy por apostar que la parada no era necesaria salvo para intentar que saquen tajada los locales). Esta vez el autobus todavía era peor, el conductor tenía pocos arrestos y menos luces. Entre querer timar a los turistas que ya habían pagado su trayecto y paradas intermedias para recoger transportes especiales (que colocaba sobre su salpicadero como si nada) nos dejaron en Sanur, donde otro transporte nos recogió para llevarnos a nuestro hotel.

En total hablamos de 1 barco grande, 1 ferry pequeño, 2 lanchas, 2 autobuses y un mini micro bus. Casi nada. Todo por 375000Rp, un poco más caro que el avión  (a falta de sumarle los taxis). Que quede claro que por si nosotros fuera habríamosido en avión eh!!
Finalmente, llegamos a Sanur y nos tomamos un buen baño, aprovechamos para decirle a Ron que llamara al alquiler del coche que nos lo puso delante de la puerta en 1 hora y nos dirigimos a Denpasar a buscar una tienda que en teoría tenia tallas grandes. Llegar a Denpasar fue un infierno con un tráfico brutal y en una zona donde apenas se ven turistas. El centro comercial de Denpasar resultó ser un poco cotroso, por decir algo bueno de él.Eso sí , tenían a cuatro empleados para cada puerta del parking.
Tras comprar un par de zapatillas (más que nada por el currele que se metió la dependienta buscando modelos) nos marchamos dirección a Sanur pasando antes por el Carrefour para hacer unas compras. La vuelta fue como la seda, directa y sin fallos.
Otro día más había pasado.

domingo, 27 de julio de 2008

DIA 35 : GILI TU (o 2 en inglés fonético)


Buah, que bien han sentado los colchones del hotel, es un timo, pero al menos se han gastado su dinerillo en traer unos colchones decentes. El desayuno no está mal, es completo, balinés , continental y americano, todo para todos. Eso sí , la bollería no es muy fina (buff, estoy hecho un experto yo en esas lides).
Como el check-out es a las 12 decidimos irnos a la playa y luego volver para aprovechar el día. Salimos en dirección a horizontal de nuevo con nuestras toallas y cremas (el factor 50 forever, baby!) y nos tiramos en Horizontal mientras Rafa y Meli se van a dar un paseo por la isla. Estamos alli tirados, son las 8 de la mañana y no hay nadie, eso si, el sol ya está pegando en todo lo alto. Los extranjeros la están durmiendo o preparando sus bártulos para irse de la isla (hay dos horarios de transporte, las 7 de la mañana y las 4 de la tarde). Nosotros tirados durmiendo al sol y de repente se acercan unos chavales de Lombok que están haciendo un trabajo para la escuela, es Domingo y se han venido todas las clases de 17 años a la isla a buscar turistas para practicar el inglés. Tienen que conseguir una foto, un email y una dirección completa. Como nosotros somos los únicos por las inmediaciones somos los agraciados con acentos imposibles y algunas contestaciones cuando menos curiosas.

En todo grupo hay un guay y en éste pretendía quedarse con mis gafas de sol, eso sí, le mandamos a tomar viento fresco (sus amigos y yo). También estaban muy interesados en la vida social de la gente ,que si teníamos novia, que si la buscábamos e incluso se lanzaban a llamar a las extranjeras para socializar. Las chicas, todas musulmanas, iban tapadas con el pañuelo tradicional pero dejaban de ser curiosas y se querían sacar fotos con los extranjeros. En concreto , una de ellas se agarraba de más!! Además curiosamente era la única que no llevaba pañuelo (se supone que no era mujer todavía pero a los 17 sonaba todo un poco raro) y después se puso el pañuelo asi que supongo que se estaba escaqueando.
Como iba a ser el segundo y último día en la isla alquilamos un equipo de snorkeling (buceo para los amigos) y estuvimos disfrutando de las orillas cristalinas de la playa. De no ser por las fuertes corrientes que te arrastraban y no te dejaban quedarte parado en un sitio la experiencia habría sido mucho mejor. Lo más inteligente era subir playa arriba hasta la punta de la isla , meterse con mucho cuidado pues el coral totalmente destrozado te puede machacar y punzar los pies y dejarse caer con la corriente hasta el final de la playa de Horizontal. En el camino puedes ver todo tipo de peces, en profundidades pequeñas y grandes, ya que al ser una isla los taludes son impresionantes. De hecho, si te desplazabas un poco hacia los puntos donde fondeaban los barcos pasabas de 4 o 5 metros a 30 o 40 así del tirón. Claro, ahi se empezaban a ver peces mucho más grandes y vimos un pez flauta de 2 metros!!! (si lo comparamos con los de Phuket que no pasaban de 1 metro es bastante diferencia). Estuvimos todo el día haciendo snorkel tanto Bruno como yo, Rafa y Meli pasaron porque el sol pegaba de lo lindo y preferían el retiro en nuestro nuevo hotel.
Hablando del hotel, en el día de ayer ya habíamos dejado reservado otro de los recomendados que además tenía una vacante. El Beach Hotel pertenece a un matrimonio australiano que se lo está montando de perlas en la isla. Tienen un hotel con piscinas de agua fresca (1 para todos los huéspedes, otra para la villa de 6 personas que tienen y una más pequeña en la zona donde se encuentra la nuestra). Se agradece el agua fresca para eliminar todo el rastro de salitre que no es poco. Además nuestras habitaciones tienne agua fresca, ya que se encuentran en una villa privada justo debajo de la que ocupan los dueños, que no son tontos. El Beach Hotel tiene además una barbacoa, un bar en la piscina y un restaurante frente al hotel donde sirven los desayunos. Puedes usar la piscina del hotel si tomas algo en el bar de la piscina o si estás en el hotel con lo cual había unas extranjeras que se pasaban el día allí tiradas (las vimos ayer y hoy volvían a estar).

Comimos en uno de los locales de divers que tienen el paquete completo (diving, comida y alojamiento). La comida era abundante y estaba muy rica. Además no metían leches con la bebida lo cual se agradecía. Acabamos de comer y nos fuimos de nuevo a Horizontal a sacarle más partido a la playa. Cuando ya estábamos algo aburridos cogimos los bártulos y nos fuimos bordeando la playa y la isla hasta llegar al Sharks point donde teóricamente puedes bucear con tiburones , pero como había que caminar mucho por el coral muerto para llegar al punto de inmersión pasamos del tema y nos fuimos bajando por la playa de nuevo buceando. Además , ya hemos buceado con tiburones :)
Todo este tiempo Rafa y Meli se lo pasaron en la piscina del hotel porque estaban cansados de la playa y del salitre.Nosotros hasta tarde no nos acercamos a meternos una buena ducha y después tirarnos a la piscina comunal (que suena mal, pero sólo quiero decir que es a la que tienen acceso todos los huéspedes). Un baño reparador y nos dirigimos a nuestra habitación donde nos dimos otro baño en nuestra piscina privada , por esto de probarlas todas y nos preparamos para ir a cenar.
Aquí tengo que hacer un inciso para hablar de una mujer. La verdad, supongo que era modelo y famosa porque era espectacular (1.80 casi de altura, delgada, morena y muy guapa) a la que acompañaba su novio también modelo supongo. La peculiaridad de esta chica es que se tapaba como si fuera famosa, se iba a la zona más escondida del bar , llevaba puesto un sombrero vaquero y un pareo tapándose... No se, me quedé con ganas de saber quien era, aunque si fuera australiana no tendría ni idea (a menos que hubiese sido Miranda Kerr pero en ese caso iría con Orlando Bloom).
Al lío, después de ducharnos y adecentarnos nos fuimos a tomar algo al Beach Restaurant (vamos, el restaurante en frente del hotel). La gente asediaba su barbacoa como si de un castillo normando se tratara y tenía una pinta espectacular. Si bien no era el sitio más barato la presentación y la higiene son extremas y puedes ver lo que te sirven, como lo preparan, donde lo guardan, etc... lo que te da un plus de confianza.
Bruno se tomó una hamburguesa australiana espectacular y yo un Goreng que si bien se comía no estaba tan bueno como en otros lugares (el Ketupak por ejemplo). Meli dio cuenta de su ensalada de frutas (como se cuida esta Meli) y Rafa de su plato.

Una vez cenados nos dirigimos a nuestra habitación ya que salíamos en el barco de Perama a las 7am y levantarse iba a ser un dolor.

sábado, 26 de julio de 2008

DIA 34 : Gili


Que no, que no os estoy insultando, que es el nombre que tienen las islas a las que hemos ido hoy. Como Bali se nos está quedando pequeña, a fin de cuentas no es más que una isla , nos hemos ido a Lombok para desde allí acercarnos a Gili Trawangan. Lo primero, hemos roto nuestra norma de las 7 am... Como tenemos que estar con dos horas de antelación hemos salido a las 6 dirección al aeropuerto. Nos ha venido a buscar el socio de Guayán, nuestro conductor del primer día , para llevarnos en el Toyota de la empresa. No podemos llevar nosotros el coche porque aquí no se pueden dejar en el aeropuerto (vamos, que no tienen convenio entre ellos para dejarse los coches/llaves).
Al llegar al aeropuerto entramos por la terminal doméstica, un poco pestiño. Algo curioso sobre nuestra compañía , Indonesia Airlines , es que el mismo empleado que te hace el check-in (por cierto, dos horas , ni loco, como mucho llegar 40minutos antes) es el que luego te recoge la carta de embarque y además trabaja en el avión de asistente de vuelo. Se nota que las compañías de aviones saben como recortar gastos y además yendo contracorriente (los negocios en Bali tienden a tener muchos más empleados que los estrictamente necesarios). Después de sobrevolar las distintas islas cercanas y ver los cientos de barcos pescando o transportando submarinistas aterrizamos en Mataram, el aeropuerto "internacional" de Lombok. Tiene narices, porque no hay ni terminal ni nada, directamente entras en el pasillo de recepción/salida y no hay ningún tipo de escalera o finger (más que nada porque el aeropuerto no tiene más que una planta). Bueno, al grano, el aterrizaje bastante bien, teniendo en cuenta que era un bimotor Fokker 50 ha sido toda una experiencia, bastante suave y el espacio más o menos como en cualquier Boeing (parece mentira que en un avión de juguete se tenga tanto sitio para las piernas como en uno normal).

En la "terminal" primera en la boca.Habíamos leido tanto sobre los palizas que te asediaban en el muelle donde coges el barco y como queriamos evitar inconvenientes a nuestros compis de viaje decidimos tomar un "paquete" que nos ofrecieron allí mismo tras rebajarlo 150000Rp. También informamos al agente que no le pagaríamos todo de una tacada sino en dos tramos, el primero ahora y el final una vez estuviéramos en nuestro barco. Craso error. Tras 40 minutos en el taxi através de una montaña saturada de monos llegamos al puerto. Lo primero , el taxi no puede avanzar ya que se expone a que le den guantazos los del puerto, con lo cual nos paran a 100 metros y nos hacen montar en un coche de caballos (o mejor dicho, de microcaballos porque casi eran como ponys). Para más inri el caballo hace un extraño cuando Bruno se monta y hala, a tomar por saco la camiseta y además a dejarse herida de guerra.
Llegamos a la "oficina" de tickets donde el taxista tiene que comprarnos el charter para nosotros (un barco privado vamos) y se le paga y el tipo no se como, desaparece. ¿Qué ha pasado? Pues que nos han metido el segundo gol, porque la gente de allí dice que solo les ha dado dinero para el ferry público por el que tenemos que esperar. Claro, alli estamos nosotros cabreados soltando improperios... Cuando llamamos a nuestro vendedor sólo da comunicando y decimos tate, nos la han liado. El problema es que vete tu a saber quien ha sido porque estos del puerto son bastante amenazadores, de hecho y tras decir al jefe que denunciaríamos el asunto a la policía turística me amenazó con ir a buscarme a la isla. Ya ves, por mi como si viene con toda la familia... como no crezcan unos cuantos palmos la llevan cruda.  Por cierto, que el fenómeno me pedía que hablara con la local a lo que le dije que nones que total ya los tenían comprados (aqui si no es la policía turística ni caso) pero fue mencionar a la turística y cambiarle la cara, la actitud y demostrar el miedo.
Como tampoco queríamos estropear nuestro viaje y no había solución al entuerto salvo denunciar nos montamos en el ferry público destino a la isla. Durante el trayecto de casi 1 h (para 10 kilómetros a lo sumo) hablamos con locales que nos comentaron que era muy habitual lo que nos había pasado y que ellos apostaban por echarle la culpa a los del puerto que solían ser muy intimidadores. Durante el trayecto nos llamó alguien que resultó ser el que nos había vendido el billete que cuando se enteró de quien éramos (probablemente le saliera número oculto) nos colgó en menos.
Una vez en la isla nos dispusimos a buscar alojamiento ya que por internet sólo había dos sitios con disponibilidad  inmediata y eran bastante caros. Después de patearnos el margen de la isla llegamos a la conclusión de que la cosa iba a estar difícil ya que todos los sitios con buenas reviews estaban completos. De todas formas dimos con habitaciones en dos sitios , uno un local de divers que tenían bungalows y otro un hotel que podíamos haber cogido online y que era muy caro. Al final tragamos con el caro a pesar de mi firme oposición. El de los divers tenía mejor clientela y no valía ni la cuarta parte que el hotel al que finalmente fuimos y que, salvo por incluir desayuno y tener una piscina suntuosa no era más llamativo que cualquier otro.Si bien es cierto que las camas resultaron ser muy cómodas no merecía la pena por el precio.
Al ser una isla apenas hay agua fresca en las duchas, te tienes que bañar con agua salada y lo que sí hay , como en este caso, es un grifo con agua desalada o de traida (en barco desde la otra isla claro). Ese mismo día aprovechamos para dar una vuelta por la isla y ver que estaba a tope de turistas. Se agradece que no tengan vehículos a motor ya que se evita la contaminación (bueno, los caballos también contaminan a su manera) y se hace todo más relajado. Los extranjeros vienen a Gili por dos motivos, hacer submarinismo (hay casi 10 negocios en una isla enana dedicados a sacar los distintos cursos a precios muy asequibles) y a estar relajados (escapando de Bali) o disfrutar de la fiesta (con drogas incluidas que te ofrecen por todos lados).
La playa Horizontal (la más grande de Trawagan) es genial, arena fina, sombra de los árboles cercana y agua cristalina con superficie de coral cerca (aunque esté hecho polvo). Nos quedamos en la playa tirados toda la tarde, cerca de un garito que ponía tumbonas de estilo árabe en la playa para tu disfrute si te tomas algo del bar. Un sitio muy chill out que estaba a tope y donde se podía escuchar la banda sonora de la Playa (vamos, muy paradisíaco).
Comimos en un restaurante árabe comida halal. Lombok y las Gili son de mayoría árabe , al contrario que Bali que es hinduista. Son árabes bastante relajados eso sí y no dan mucho la lata con la mezquita que hay en la isla, apenas se oyen las llamadas a la oración (que por otra parte no he visto ejecutar en ningún lado).
Tras un día atareado nos fuimos al hotel con ganas de descansar.

viernes, 25 de julio de 2008

Dia 33: Bali



Hoy nos levantamos a una hora prudencial, no como ayer que dormimos hasta las 9. Salimos rápido para Jimbaran, una zona donde leímos que las playas eran de buena calidad y , la verdad, no defraudaron.
Después de 30 minutos en el bólido llegamos y, por primera vez, no había ningún aparcacoches raudo a hacer negocio. Además la playa estaba casi vacía, nosotros, unos cuantos locales y unos principiantes en el negocio del surf.
Aparcamos frente a las escaleras de bajada y tranquilamente explayamos nuestras sombrillas , apenas había tumbonas y frente a nosotros se encontraban grupos de gente que estaban esperando a sus monitores de surf. En total unas 20 personas divididas en sus pequeños grupos de amigos, destacando un grupo de 15 rusos y luego 3 monitores. Se pusieron a hacer ejercicios con la tabla sobre la playa y tras un rato se lanzaron al mar, que estaba totalmente tranquilo y sin olas.
Supongo que vendrán precisamente por eso, porque apenas hay olas y pueden practicar sin quedar ridículos o sin que les pasen por encima los profesionales. Apenas conseguian levantarse y ya estaban cayéndose al mar. Eran bastante entretenidos de ver, como gritaban cuando conseguían cabalgar una ola aunque sólo fuera unos pocos metros. Para nosotros la playa también está genial, hay mucha arena blanca, como 25 metros hasta el agua subiendo la marea y hay mucha zona para bañistas.
Aprovechamos para tomar algunas olas y hacer body surfing, Rafa en concreto se hizo casi 50 metros con una ola.
Después de tomar el sol como descosidos durante 5 horas (eso si , pasando por la crema del FPS 50) nos dirigimos a comer. Como no podía ser menos tocaba visitar al McDonalds para cumplir una de nuestras tradiciones, tomarnos un BigMac que nos salió por 67000 IRP , sobre 4.5 € , ligeramente más caro que en Tailandia o China comparado con la comida local. Si bien es cierto que el abuso de personal de servicio que se ve en Bali no es comparable a nada que haya visto. El McDonalds tenía al menos 12 empleados y uno de ellos sólo limpiaba las huellas que dejaban los clientes al salir en la puerta de cristal. Además las hamburguesas aquí en Bali son más grandes (se nota que la clientela es australiana). También , en el cajero al lado del restaurante es donde más dinero hemos podido sacar, no había límite!! (lo normal es que no te dejen sacar más de 1500000 rupias y en billetes de 50000 usualmente).
Salimos del McDonalds en dirección a Nusa Dua , la autovía principal de Bali, donde realizamos varias paradas en las distintas tiendas de surfers (outlets en su mayoría) y realizamos unas cuantas compras. Sobre estas tiendas, lo mejor es que tienen empleados de "seguridad" cuyo trabajo es ayudarte a aparcar el coche y luego , a la hora de salir, aventurarse a la carretera a pecho descubierto armados con una luzecita e intentar parar el tráfico para que puedas incorporarte. Un trabajo simple pero arriesgado , sobre todo teniendo en cuenta lo cafres que son conduciendo (cafres, pero con su propio orden eso si).
Después de realizar unas compras cumplimos otro de nuestros hitos, pasarnos por un supermercado de los grandes , en este caso un Carrefour a ver que se cuece en la sección alimenticia. Salvo los pasillos dedicados a las especias, las pastas y arroces, no hay grandes diferencias con un Carrefour en España. Todos los demás puestos están presentes , si bien los de embutidos y quesos son mucho más reducidos ya que aquí son principalmente de importación y reservados los turistas.
También tienen un deli con comida autóctona que habríamos probado si tuviéramos microondas en nuestras habitación, pero como no era el caso nos conformamos con los noodles de Nassin que están riquísimos.
Salimos del Carrefour en dirección a nuestro hotel de nuevo. Lo bueno de Bali es que hay 3 arterias principales que comunican los grandes núcleos de población y que comunican las zonas turísticas, y si bien al principio pueden ser un poco liosos una vez te acostumbras no es difícil moverse por ellos. Una vez en Sanur en 2 minutos te plantas en el Beach Villas , antes Mangrove.

jueves, 24 de julio de 2008

Dia 32 : Bali , cena en Ketupat



El día de hoy lo hemos dedicado principalmente a diseñar nuestros próximos días en Bali. Hemos decidido pasar de visitar el volcán por las malas informaciones que tenemos de los guías de la zona.
En primer lugar ,si vas con tu coche y no quieres contratar a un guía (en realidad no se necesita para nada) puedes acabar con el cable de los frenos cortado y empotrado contra un árbol. Si vas en taxi y no contratas un guía es posible que te pase algo en la montaña. Si vas a la ciudad y te quedas a dormir para salir sin un guía es posible que te persiga todo el día por la ciudad diciendote que va a matarte (así es el gremio de los guías en esta zona).
Aunque es un punto importante de Bali, un volcán activo de 3300 metros de altura, decidimos saltárnoslo simplemente para no pagarles. No queremos contribuir a que esta gente siga con este estilo de vida, por lo cual, si eso implica perdernos ese POI , pues nos lo perdemos.
Para comepensar, decidimos irnos a las Gili Islands, unas islas cercanas que pertenecen al término de Lombok (otro de los puntos turísticos importantes de Indonesia y cuya mayor peculiaridad es que , a diferencia de la Bali hinduista, la mayoría es islámica) y que son muy famosas por los submarinistas y sus playas paradisíacas.
Nos acercamos al aeropuerto a comparar las distintas opciones que teníamos para llegar hasta alli siendo la del avión + taxi + barco la más apetecible en principio. El trayecto lo hacen 4 compañías y aunque el precio es aproximado 375000-495000IDR las diferencias estriban en el tipo de avión (Fokker 50 o Boeing 727) y en los horarios. Optamos finalmente por las Indonesian Transit Airlines que vuelan en un Fokker 50 (por eso de probar un bimotor). Tras coger los tickets nos fuimos a comer al Solaria (una cadena de resturantes indonesia) para posteriormente acercarnos a Kuta. Aparcamos en el CC Sogo (una zona cómoda para aparcar si te quieres desplazar por Kuta y no quieres bajar por la playa) y nos fuimos de paseo por Kuta Sq. (que no nos hizo ninguna gracia porque las tiendas que prometían gangas en realidad no lo eran) y subimos hasta Legian en busca del Ketupat, un restaurante que nos había recomendado Nely (gracias Nely).
Fuimos caminando por Legian para encontrarlo pues nos habíamos dejado el papel donde teníamos anotado el número y durante el paseo se nos ofrecieron masajes con happy ending (prostitución) , drogas (vete tu a saber si no sería un policía a la búsqueda de un novato al que sacar dinero) y comida , mucha comida (se aglutinan decenas de restaurantes en esta zona).
Tras pasarnos el Ketupat en primera instancia pensábamos ya dejar de buscarlo cuando de repente, volviendo por el lado adecuado de la calle vimos el cartel del restaurante. Está bastante escondido y sólo tiene una ligera lucecilla que ilumina a la meitre y a la mesa donde se encuentra la carta para consultar (si algo tienen en común la mayoría de restaurantes en Asia es la presencia de una carta frente al local y dependiendo del sitio, una o varias camareras invitándote a entrar). En este caso la camarera o meitre tampoco hace un gran esfuerzo por conseguir clientes.
Una vez decidimos entrar (era algo que estaba en nuestra agenda desde el primer día) nos encantó el ambiente.Mesas rodeando una piscina e iluminadas con velas. Un servicio raudo y eficaz que igual te proporciona spray antimosquitos que te acompaña al baño para que no te pierdas.
La comida que probamos estaba genial (aunque la carne de Cabra no nos convenció mucho a ninguno y tampoco el acompañamiento de arroz que parecía patata y que da nombre al restaurante, el ketupat). La presentación ,simplemente espectacular. Desde el arroz Nasi Goreng presentado en la cáscara de una piña hasta los distintos satays (pinchos morunos) de langostinos o carne presentados sobre unos pequeños recipientes de barro con brasas dentro hasta los cócteles de frutas o las ensaladas. Todo estaba realmente rico y el precio, alto comparado con otros sitios en la zona, siguie siendo irrisorio, sobre todo si piensas que el restaurante equiparable a éste podría ser un Soriano o Los Abetos.


Después de dar cuenta de 1 plato por persona salvo los hermanos tocomocho que nos tomamos 3 entre los dos nos fuimos de nuevo en dirección al Sogo a coger el coche para marcharnos al hotel.
Estábamos llenos, tan llenos que nos daba incluso pereza caminar pero después de 15 minutos ya la comida se había asentado y estábamos dispuestos a coger el coche para el hotel. Salimos del parking (3000IDR el mínimo y 5000IDR el máximo) y dirigiéndonos a la autovía llegamos en 25 minutos al hotel con ganas de coger la cama a base de bien.

miércoles, 23 de julio de 2008

Dia 31 : Bali




Con la resaca de enfrentarnos a la policía de nuevo en cualquier momento con nuestro justificante sustituto del permiso de circulación salimos a la carretera en dirección a Kuta. Decidimos acercarnos al Sogo, un centro comercial operado por británicos que tienen más en Hong Kong a ver tiendas y buscar unas compras.
En principio compramos algunas camisetas tipo surfeiro y salimos en dirección a Kuta Beach.
Salimos del Sogo y pasamos por delante de Kuta Square, el centro neurálgico de las compras en Bali (las de tiendas y réplicas claro) donde te partes viendo cosas como 5 tiendas de Dolce & Gabbana juntas. Pasamos totalmente de esta plaza y nos dirigimos a Kuta Beach, a pocos metros donde aparcamos para ver la playa. Estaba a tope, surfistas, balineses haciendo negocio, más surfistas, aparcacoches haciendo negocio, más surfistas, restaurantes de fast food americanos, más surfistas, etc... Salimos de aquí a toda velocidad y nos fuimos a las calles Poppies (1 y 2) que son calles estrechas y alargadas que comunican la playa con la calle de Legian-Seminyak (la misma calle atraviesa dos zonas o barrios y cambia de nombre). En estas calles además de multitud de restaurantes, puestos de artesanía, réplicas, tiendas de surferos, sastres y comercios de todo tipo hay mucha niña mona y mucho surfer hipermusculado. Por la noche esto se convierte en un Patong v2.0 con menos prostitución. Menudas risas nos echamos con un cartel que ponía "Special Offer Genuine Fakes" con respecto a relojes. Hala, ahi lo tienes, vendemos copias de las buenas eh?
Al acabar Poppies 1 pasamos por delante del monumento a las víctimas de los atentados de islamistas radicales del 2002 y nos dirigimos de nuevo a la calle de la playa por Poppies 2. Otra más llena de lo mismo: surfers, tiendas, chicas monas y mucho balinés intentando hacer negocio. Pasamos por delante del sastre del que teníamos referencia y decidimos dejar para más adelante una visita para tomar medidas. Aprovechamos para comer en el Illy, un restaurante destinado principalmente al público australiano (casi todos los clientes eran de esta nacionalidad) y donde servían una comida indonesia muy rica y además unas hamburguesas enormes. Volvimos a la playa de Kuta , cogimos el coche y nos dirigimos a Seminyak a ver la playa y de paso a tomar un poco el sol. Se agradecía que no había olas y por lo tanto ni un surfer dando la barrila (que cansan un poco ya que se quedan con toda la playa para ellos). Lo peor de la playa es que es arena volcánica, muy fina, de esas que se quedan pegadas al cuerpo y que luego no hay quien se quite.
Recibimos como siempre las visitas de nuestros vendedores que nos traían de todo: gafas de sol, sombreros, sarongs, cerbatanas!! (desde Borneo oiga) y hasta mujeres (un señor de 50 años pasó del ¿quiere unas camisetas? a ¿quiere una mujer?). A las 5 de la tarde ya no lucía el sol y además Rafa estaba harto de estar en la playa así que nos marchamos en dirección al hotel. En el trayecto nos dimos cuenta de que me había dejado las gafas en la playa, así que media vuelta y allí seguían ,solitas, sin nadie que las hubiera tocado (si hubiera sido la cámara otro gallo cantaría).
Salimos de la playa de nuevo y nos dirigimos al templo de Tanah Lot, otro de los tres más famosos de Bali. Llegamos al atardecer, con la luz perfecta para hacer bonitas fotos del entorno, del templo sobre la roca (al que se podía acceder por estar la marea baja) , a tiempo de ver como los monjes ungían a los turistas con las típicas pinturas y como unas japonesas aprovechaban cualquier roca para hacer posturas de modelos. También tuvimos la oportunidad de tocar una Pitón enorme que andaba por allí de paseo. La piel es rugosa, no es tan suave como esperaba y está fresquita. Desde una de las puntas de roca de las que configuran la costa del templo se puede ver con tranquilidad una cueva repleta de murciélagos que parecen dar la bienvenida a Batman. Después de una hora en el templo nos dirigimos a la salida, dispuestos a evitar el tráfico de los turistas y escopetados intentamos tomar el camino más rápido a Sanur. No se si al final lo conseguimos pero al menos el tráfico era asumible y operando el atlas que tenemos y la PSP llegamos en 1:30 al hotel. Además por el camino pasamos por las terrazas de arroz de Tabanan, que son enormes pero que no son muy "pintorescas" pues están llenas de plásticos para asustar a las aves.



Al llegar al hotel nos esperaba el descanso del guerrero, un baño reparador en la piscina iluminada escuchando la poderosa voz de Amy Winehouse.



lunes, 21 de julio de 2008

Dia 28 : Bali

Aunque Belén ya se sabe nuestra hora oficial de levantarnos la seguiré poniendo. 7 am en pie. Desayunamos en una de las mesas que rodean la cocina. Nos atienden en cuanto nos sentamos y nos sirven unos excelentes zumos naturales, unos sabrosísimos crepes con platano y tostadas con té o café. En realidad hay muchos mas platos en la carta pero estos están muy sabrosos.
Llega entonces nuestro conductor de la noche anterior que nos trae un 4x4, un Suzuki Katana equivalente a nuestro Santana. Firmamos un contrato de extensión prorrogable por el que pagamos 150000 rupias indonesias por día y 30 dolares de franquicia en caso de accidente. Esto son en total 20 euros lo cual esta bien. El.coche está hecho polvo y aguantamos con él sólo un dia ya que al pasar de 70 se vuelve muy inestable y ademas el coche y el viento no se llevan muy bien. Salimos del hotel a las 9 en busqueda de Dreamland, una playa de surfistas pero acabamos al sur, en la península,  en Suluban donde hacen todo tipo de deportes acuaticos. Pagamos el pato pues un fulano uniformado nos cobra por aparcar en la playa. Lo de pagar es más o menos norma te van a cobrar entre 1000 y 10000 en muchos sitios, lo que ya no es tan normal es que te bloqueen la via principal y practicamente te empujen a su aparcamiento. Como de la experiencia se aprende en futuras ocasiones no nos pasará lo mismo.
Enfilamos hacia el norte y nos dirigimos a Uluwatu una zona de surfistas a la que eufemísticamente llaman playa pero que se trata de un camino entre rocas para fácilmente acceder al arrecife. Enclavado en las rocas a 50 metros de altura se encuentra un poblado donde se alojan, comen , compran y reparan sus tablas los surfers. Tambien hay varios puestos para que fotógrafos amateur o profesionales saquen fotos. Nos estamos un rato y nos vamos en busca de Dreamland, una playa escondida también paraíso de los surfistas. No hay indicaciones ni aparecen en los mapas pero gracias a unos surfistas llegamos facilmente. Flanquean la carretera de entrada un par de figuras enormes representando a demonios protectores. La carretera es de 4 carriles con una mediana enorme y varias rotondas. Dentro, un resort con su campo de golf; pero aún asi y menos mal, la playa sigue siendo publica. Nos cobran 10000 por aparcar (en moto serian 5000) y bajamos a la playa.

Las olas son contínuas y bastante grandes aunque el dia no es excelente para los surfistas. Nos pegamos un baño y lamentamos darnos cuenta de que el agua en el Océano Índico no está igual de caliente en todos lados. Comparado con Tailandia aqui está congelada.
Meli se ha dado un buen masaje de 1h30m que hemos rebajado de 100000 a 50000 Rupias aunque luego a mi me lo ofrecerían por 20000 por ser un dia de poco negocio. Despues de bañarnos unas cuantas veces nos vamos hacia el templo de Uluwatu ( Pura Luhur Uluwatu), uno de los más famosos de Bali a ver atardecer. Nos damos una vuelta por el templo (3000 la entrada y 1000 el parking) para el que nos visten con sarongs (los paños tradicionales para tapar nuestras piernas) y unos fajines que ni Sandokan. Si bien pasamos al mediodia y solo habia balineses rezando, comiendo y presentando sus respetos ahora se trata de un hervidero de turistas reunidos para contemplar la puesta de sol y un espectáculo tradicional que les montan todos los domingos (que de algo hay que comer). A Meli un mono muy listo casi le roba la cámara. Estaba ella sentada en un muro bajo con la cámara en su bolsa a su espalda cuando uno de los monos se acercó por detrás sigilosamente y comenzó a desplazar las cremalleras, como estabamos atentos le echamos y se rebotó un poco con nosotros. Ya lo anuncian en carteles, cuidado con los monos, pero no sabiamos en que medida.
Despues del templo fuimos en busca del Carrefour de Denpasar a comprar chucherias y cosas para llenar la nevera. Además asi cumplimos con nuestras tradiciones de visitar un supermercado grande donde ver lo que comen habitualmente estas buenas gentes. Como no habiamos comido tambien aprovechamos para comer/cenar en el KFC unos platos de comida rápida con su pequeño toque indonesio (via el picante que era bastante fuerte).
Salimos del Carrefour donde los guardias de seguridad examinan los bolsos y los bajos de los coches para dar falsos aires de seguridad en la isla (recordad los atentados del 2002 donde murieron más de 100 personas) ya que cualquiera puede introducir una bomba sin el mas minimo problema (lo que se llega a aprender en 24).
Una vez en el hotel nos reunimos en nuestra habitación para intentar planificar un poco mejor el dia siguiente y optimizar el tiempo.

El acontecimiento: llegamos a punto para ver las 8 ultimas vueltas de la F1 gracias a que la mujer del dueño se zapeo todos los canales hasta encontrarlo en un canal indonesio que retransmite en inglés (o en el idioma que le llegue la señal, no traducen los eventos).

La zona: Es fácil llegar a Dreamland desde Uluwatu, sólo hay que seguir en dirección Kuta por la península de Bukit.

domingo, 20 de julio de 2008

Dia 27 : Bangkok, Kuala Lumpur, Bali

Empezaremos el post con un pequeño concurso, un regalo a escoger por mí para el primero que ponga en el post un comentario con la respuesta. ¿A qué hora nos levantamos esta mañana? El que más se aproxime gana.
Segundo noche en Bangkok y volvemos a usar el teléfono del hotel para despertarnos. Rafa y Meli están ya listos y a nosotros, como no, todavía nos quedan bastantes cosas para recoger. Un día de estos las mochilas van a explotar, están tan gruesas que ni un botillo...
Como siempre, desayuno copioso. Como salimos temprano, a las 10:00am teníamos el avión y como hay que estar 2 horas antes en la terminal para vuelos internacionales a las 8:30am estábamos en el aeropuerto. No se cúal es el motivo, pero es la vez que más barato nos ha salido el taxi, y ya es de mosqueo cuando siempre es el mismo recorrido. De todas formas, llegamos con tiempo, hacemos el check-in y nos vamos  a pasar inmigración. Menudas colas y con que pachorra atendían. Estuvimos al menos 20 minutos esperando cuando otras filas avanzaban a mucha más velocidad, nos habia tocado el cantinflas del grupo de currantes.
Teníamos que cobrar el 7% de impuestos por la compra de la cámara y una vez en la oficina dijeron que no se podía cobrar porque tenía fecha de una semana. Para poder recibir el reembolso tienes que rellenar primero un formulario en la oficina de VAT Refund , una vez lo tienes rellenado y sellado y estás dentro de la terminal de salida es cuando te pueden pagar el reembolso. Pero claro, cuando fuimos a Phuket ya habíamos pasado por la oficina y de eso hacía una semana. Rafa , Meli y Bruno se fueron a la puerta de embarque ya que habíamos pedido Express Boarding (para poder entrar los primeros en el avión, para lo cual había que pagar un pequeño plus pero te garantizabas los mejores asientos) y yo me fui a cobrar. Como me dijeron, necesitaba un nuevo sello, y fui a buscarlo. El problema es que no podía salir de nuevo a sellar el formulario ya que estaba muy cerca del horario de salida y además con lo lentos que son en el servicio de inmigración me podría llevar una vida.
Me acerqué a un trabajador del aeropuerto trajeado, le comenté la situación y se ofreció a acercarse a la oficina. Para ello necesitaba mi pasaporte y el formulario viejo. Se lo dejé tras decirme que en 5 minutos lo tendría todo resuelto. Pero el tiempo pasaba y él no aparecía, me parecía oir mi nombre por megafonía del aeropuerto y aunque halagador que digan tu nombre (bueno, en realidad no , pero queda bien) prefería coger mi vuelo que obtener el reembolso del VAT. Cuando quedaban 10 minutos para que cerraran la puerta de embarque aparece el funcionario y viene sin el sello. Yo totalmente agobiado miró el maldito sello y me C*G* en todos los muertos de los funcionarios y me dirigo a mi puerta de embarque que casualmente está en el punto más opuesto al que me encuentro (malditas compañías lowcost cogiendo siempre los peores sitios). No soy Carl Lewis y tampoco estoy en forma, pero es que para más inri voy cargando con una mochila de 9 kilos que me rompen la espalda. En el trayecto me cargo a un niño pequeño, casi pierdo el corazón que se me salía del pecho y estoy más agobiado de lo que no he estado en todo el viaje.
Llegó al control de seguridad y los muy cafres me hacen abrir la mochila , con todas las bolsas que tengo dentro (que no son pocas, al menos 8) y me hacen sacar todo lo que va en su interior. Yo con mi billete de embarque en la mano intententando que me hagan caso y nada, con la lengua fuera, sudando , hecho polvo y por encima procurando saltarme la barrera idiomática. Buff, hacía mucho tiempo que no lo pasaba tan mal. Llego con la lengua fuera, con la tarjeta en la mano y gritándole a los de AirAsia que esperen por mi, que no me dejen en tierra (que ya tengo experiencia) y soy el último en entrar cuando ya tapaban las entradas con sillas.
Me relajo al cruzar el finger y los tres mosqueteros que me esperan en el avión me reciben con caras de alivio. Ya estaban planificando que iba a hacer para llegar a Bali y como comunicarse conmigo, con eso os digo todo.
Después en el avión hablamos de la situación, nos relajamos todos un poco y tras 1h30 llegamos a Kuala Lumpur.
El aeropuerto malayo recibió el año pasado el premio al mejor aeropuerto del mundo. Eso sí, no donde nosotros estamos. Porque AirAsia tiene una terminal propia en el aeropuerto, siendo su base de operaciones (la compañía es malaya aunque tenga una rama tailandesa). Esta terminal es cutre a más no poder. Está a tope de gente, apenas tiene servicios y ni un solo ascensor o cinta transportadora. De hecho la zona de embarque es más parecida a una carnicería donde te dan la vez (algo así como el sergas, sin ofender a los funcionarios de nuestro excelente sistema de salud) que a un aeropuerto.
Nos quedamos con el detalle de que también dejan en tierra a los coreanos , ya que se pasan más de media hora llamando por megafonía (al menos aquí lo hacen) infructuosamente. También tenemos que echarle una carrera a una malaya que se pasa todo el rato hablando en inglés con su familia y que se parece un montón a Rihanna para coger los mejores asienteos del avión. Gracias a su pericia y la de su hermano , que se echan la gran carrera , se quedan con los 6 primeros asientos para la familia.
Tras las tres horas de vuelo llegamos al aeropuerto de Denpasar , en Bali. Llegar a un aeropuerto de noche es una sensación totalmente disinta a verlo de día, de hecho te puedes llevar una impresión errónea, pero aquí la maquinaria es antigua y los operarios no son excesivamente hábiles. Además , te cobran una visa de 25$ por venir de turista que podemos pagar gracias a Rafa y Meli que venían preparados. Sacamos el máximo posible de dinero que nos dejan (de una sola tacada) e intentamos cruzar el control de aduanas y los trabajadores no tienen ni idea así que nos hacen perder el tiempo un buen rato. Salimos al exterior donde nos recibe un chófer que nos proporciona nuestro hotel, el Sanur Beach Villa. Un hotel que cogimos el día anterior gracias a las referencias que teníamos en el foro de Lonely Planet y en Trip Advisor. En 30 minutos llegamos al hotel desde el aeropuerto. Es un sitio bastante reservado, alejado del ruido de Khuta aunque tiene otros ruidos que comentaremos más adelante. El hotel lo componen 6 villas simples al estilo balinés (una habitación con cama de matrimonio, baño abierto al cielo, recibidor) y 3 villas dobles, de las cuales 4 están ocupadas por inquilintos residentes. Tras dejar nuestras cosas y hablar con el dueño del hotel que está lesionado nos decidimos a ir a cenar a un sitio de una playa cercana.
En la playa, un par de balineses se dedican a bajar las palmeras a pulso para colocarles algo parecido a aspas de molinos de viento que no dejan de hacer un ruido semejante al de un bombeo acompasado. Parece ser que lo hacen para alejar a los malos espíritus y atraer la suerte (Bali es de mayoría hinduista animista) y por todos lados se pueden ver ofrendas (a cada comida se deja una proporción de lo comido en un altar). En la playa se ve a gente con lámparas pescando en la orilla, no se si recogen pequeños peces o algún tipo de coquilla.
Pedimos la cena en un chiringuito playero con vistas a la playa noctura. Los 4 comemos por menos de 10€ , algo más que en Tailandia aunque nos da la impresión de que los precios están algo inflados.
Después de cenar nos vamos a las habitaciones donde intentamos preparar los planes para el dia siguiente.
Por cierto, el hotel tiene internet, pero no de alta velocidad (mira que nos ha costado conseguir el maldito internet gratis en esta isla) así que las fotos están racionadas (le cobran por mega transferido y super lento). Por supuesto , ni un sólo vídeo.

sábado, 19 de julio de 2008

Dia 26: Bangkok

Otro día comienza a las 7am (y van ya muchos), casi me siento un asalariado.  Después de nuestro desayuno copioso enviamos a Rafa y a Meli al trayecto por Bangkok. Hicieron el mismo recorrido que nosotros en medio día y después nos reunimos en un centro comercial para comer, en uno de estos con comida de todos los paises asiáticos y probamos nuevos platos. También lo intentamos con Rafa pero se decidió por algo más tradicional (ya que los dos días que estuvo de viaje apenas comió caliente) como el KFC.
Tras tomarnos unos heladitos y smoothies de postre salimos hacia el mercado de Patrunam. Allí pudimos ver de primera mano los nuevos diseños de camisetas del mes (de aquí salen las camisetas que luego se suministran al resto de Tailandia) y Rafa se compró unas cuantas. Para nosotros también cayeron un par, por ésto de minimizar el hacer coladas...
Tras ver como uno de los empleados de los puestos salía con fardos de doscientas camisetas para vender al resto de vendedores decidimos ir a Pantip Plaza (el CC de la electrónica ) a que a Rafa se le cayera la mandibula al suelo. Se quedó impresionado por todas las tiendas y tanto él como Meli realizaron las compras de rigor. Cayó el GPS para la PSP por eso de darle uso después en Bali. Un mecanismo que funciona relativamente  bien, teniendo en cuenta que los mapas de Asia no son gran cosa. Para la PSP tienes software normal de GPS con vectorización (decir , llévame de A a B en el menor tiempo posible) o usas un sistema basado en Google Maps (que es el que tenemos para Bangkok o igual al que tendremos para Bali). El GPS es relativamente lento fijando satélites y el hecho de que no sea una pantalla táctil hace que sea un poco extraño su control pero te puede salvar de perderte.
Cansados como estábamos sólo nos quedaba coger un Taxi y dirigirnos al hotel. Pedimos la cena en recepción, realmente rica. A Meli le gustó lo suyo pero a Rafa no le entusiasmó. Volvimos a subir a la habitación a darle al Skype y comprobar billetes, horarios y todo eso y pensando en Bali.

viernes, 18 de julio de 2008

Dia 25: Phuket y Bangkok, reunión con los porriñeses

Hoy salíamos en dirección a Bangkok para dejar Phuket hasta mejor ocasión. Nos levantamos temprano, con la idea de recoger todos nuestros bártulos en un par de horas.
Como siempre, los tiempos estimados no funcionan. Después de recolocar las cremas (maldito límite de 100ml) y de guardar toda la ropa (que sólo ha aumentado en 2 bañadores y 2 pares de chancletas) pero que parecía que lleváramos media tienda... nos dispusimos a salir a la calle principal. Resulta que el grupo-taxi que contratamos en la misma agencia que nos puso el tour no iba a subir nuestra cuesta así que teníamos que bajar nosotros  a la oficina de correos a cogerlo.
En primer lugar, la de la agencia nos subió los billetes el día anterior toda mona, vestida para salir y muy guapa ella nos cobró por el servicio 240B mientras que cuando lo cogimos en el aeropuerto nos costó 180B. La ley de la demanda supongo o el cargo por hacer la gestión.
Tuvimos suerte de que  cuando bajamos no nos cayó el monzón que desde hace tres días no ha parado de caer. Pero en poco tiempo volvió a caer ... cuando ya estábamos montados en el super autobús. Otro de estos cacharros que parecen llevar un motor de 900cc para transportar a 11 personas y a el montón de maletas que llevan. Nos recogió a las 12.30 y éramos el segundo y tercero y luego aún recogió a 7 más a lo largo de Patong. Tardó casi 1h30 en recorrer los 40kms metiéndose por zonas que no habíamos pasado a la ida. Sitios con pinta de ser bastante pobres y donde había lagunas con casas al lado con pinta de tener más inquilinos mosquitos que personas.
Una vez llegamos al aeropuerto una cola para AirAsia de narices. El aeropuerto es algo viejo y parece que por él ha pasado Atila. Aunque era mucho más grande de lo que en principio pensamos a nuestra llegada. Además , como no, metían unas oxtias en las tiendas y restaurantes acordes al estilo Phuket donde todo está por decreto 3 o 4 veces más caro que en Bangkok.
Hemos tomado el avión , un Airbus muy cómodo y hemos hecho el trayecto dormidos todo el rato hasta que hemos llegado al aeropuerto de Sumerapravi. Aquí tenemos que esperar a que lleguen Rafa y Meli que vienen de Londres via Bahrein y su avión se ha retrasado casi 2 horas. Hemos llegado a las 5.30 y vamos a esperar hasta las 9.30... 4 horas en el aeropuerto que se hacen más interminables que cuando realizas una salida... Eso si, en el aeropuerto como no, anécdota. Resulta que al llegar nos hemos ido a la zona internacional para poder esperar la llegada de esta gente y nos han dejado pasar un control policial... Pero entonces he salido a un supermercado que quedaba fuera del control y al volver no me lo han dejado volver a cruzar. De hecho llevan 2 semanas con ese control que no dejan entrar a la gente cuando antes era totalmente normal. El problema es que Bruno se ha quedado dentro y he tenido que llamarle dos veces por megafonía, eso sí, lo han hecho sin problemas.
Por cierto, el aeropuerto es una extensión de lo que pasa en Tailandia. Numerosos guiris con sus compañeras tailandesas. Hombres de 80 años con mujeres de 30, tios horrendos con bellezones, chinas y malayas impresionantes... todo un espectáculo.
Después de esperar 1 hora extra por culpa de un retraso esperábamos la llegada triunfal de nuestros nuevos compañeros de viaje, pero justo a la hora que llegaban ellos había 20 vuelos más aterrizando (en los minutos próximos vamos) así que cada vez que salía un nuevo grupo intentábamos enterarnos de la nacionalidad para situarnos un poco de dónde podía venir cada vuelo, ya que el de ellos llegaba de Bahrein. Después de un buen rato llegaron y ya abrazos, reencuentros con el español (que no fuera el nuestro propio) y un sin fin de anécdotas por cada lado.
Salimos del aeropuerto en dirección a nuestro hotel, el de la semana pasada. Nos volvieron a intentar timar pero como ya venimos resabiados pues no tuvimos ningún problema, en menos de 30 minutos (ventajas de saltarse el tráfico diurno) llegábamos al hotel. También intentamos saltarnos el puesto de las "amigas" que te traducen la dirección a tailandés (ya que ya la teníamos en tailandés) pero no coló y pagamos de nuevo...
En el hotel, llegando a las 11.30pm ya no podíamos cenar así que decidimos salir a pillar algo de comer a uno de los 7Eleven cercanos. Compramos unos perritos y bebidas y unas pocas fruslerías  y nos fuimos de nuevo al hotel (Meli  y Rafa fliparon con la humedad que había en Bangkok) y les explicamos cómo tenían que hacer para ver lo mejor de Bangkok en el mínimo tiempo posible.
Hicimos las llamadas de rigor a casa y amigos para decirles que seguimos vivos y nos fuimos a dormir que a las 7am comenzaba el dia

jueves, 17 de julio de 2008

Dia 24: Phuket

Nos hemos levantado a las 7 de la mañana, desayunado y preparado la mochila para el tour. Nuestro casero nos dejó bajo la puerta de la habitación el recibo del tour ya que la noche anterior se había acercado él a pagarlo por nosotros de paso que se iba a cenar a Phuket.
A las 7:30 en teoría aparecía nuestro conductor pero allí no había nadie. Cada 5 minutos abríamos la puerta para que se diera cuenta de dónde estábamos y resulta que allí estaba nuestro casero, esperando que todo nos fuera bien. Él se encargó de llamar por teléfono a la agencia que le dijo que sí, que el coche ya había salido y que se trataba de un Chevrolet.
Os contaré una cosa sobre nuestro casero. Se trata de un inglés de unos 50 años que tiene de novia a una thai de unos 35 que es la encargada del hotel. Él tiene por su parte una empresa de buceo con un socio. Resulta que este inglés trabajó durante años en Mallorca, de monitor de buceo para los guiris. La verdad es que se sabe unas cuantas palabras en español pero no muchas.
A eso de las 8 apareció nuestro conductor. Resulta que se había parado en el CC  Blooms, a 100 metros de nuestro hotel...
Nos recogió y salimos en dirección al puerto de mar desde donde salía nuestro tour. El trayecto es bastante largo, casi 1 hora , lo bueno es que sólo estábamos nosotros dos así que íbamos muy espaciados. Nos hemos ido en dirección a Phuket y hemos atravesado la ciudad por barrios donde no se ve la presencia del guiri como en Patong ni de los bares. Después de un buen rato en el que el conductor no ha dicho ni mu, hemos llegado a nuestro puerto.
Allí nos han puesto una pegatina con el número de nuestro barco , el 3. Al final iríamos unas 25 en el Speed Boat. Una lancha grande con 3 motores de 225CV. La tripulación constaba de 1 capitán, 3 tripulantes (2 chicos y una chica) y un guía. El guía era el único que sabía inglés y era también el encargado de explicarte paso a paso en que iba a consistir el tour. Lo peor es que estábamos por un lado los que ibamos a proa , al aire libre y por el otro los de popa , bajo cubierta. Y le teníamos que escuchar repetir dos veces para cada uno de nosotros el mismo cuento. Además lo repetía palabra por palabra.
El Tour consistía en salida del puerto, viaje de 1 hora en lancha fueraborda hasta una laguna con aguas cristalinas desde la cual se puede ver una cueva de murciélagos con estalactitas y estalagmitas (aunque no hemos visto ningún murciélago) llamada Vikings Cave , que es donde llegaron los vikingos con sus drakares,  parada delante de un buda, parada para alimentar a los peces, con fruta no con pan que no lo digieren y se mueren, etc... En esta laguna decía que al estar la marea muy baja no podíamos sumergirnos (con snorkle, nada de bombonas), el hecho es que había al menos 5 barcos con la gente bañándose tan traquila.
Después dirección a Maya Bay , la playa famosa por la película con Leonardo DiCaprio  ("La Playa")... Menudo espectáculo, al menos 15 embarcaciones, a cada cual más grande para una playa hasta arriba de gente. La verdad, no estaría mal si no fuera porque está tan a tope. El agua está totalmente revuelta, no se puede ver nada y lo más llamativo son las paredes verticales que la rodean. Teóricamente tienen 500 metros de altura pero para mí que esta gente no domina los números porque no pasa de 100 y en algún caso de 50 metros. En esta playa nos hemos hecho un vídeo por la "selva profunda" que paseaba DiCaprio con unos baños, un puesto de bar y otra zona que sale en la película y que al estar con la marea baja parece más un charquito que otra cosa. Además el suelo está lleno de piedras y coral deshecho y hace mucho dañito ir sin zapatillas como te decían los fenómenos del tour.
Después de salir de Maya Bay, dirección a PhiPhi Island, al sitio supersecreto del guía para ver coral, uno de los mejores sitios, etc, etc... Vamos , era tan secreto que había 20 embarcaciones más en paralelo, menudas risas que nos hemos echado con eso. De hecho lo que pasa es que marcan las zonas asignadas a cada compañía y a cada barco dentro de esa compañía. Nos hemos puesto las aletas (de pago claro ,que aquí no tienen muy claro el concepto de todo incluido) y nos hemos tirado al océano con nuestras gafas. La zona está muy bien, hay mucho coral que no ha sido destrozado por el tsunami y bastante fauna marina. Además también hay zonas de 5 metros donde puedes aprovechar para acercarte más al fondo marino aunque nosotros que no estamos acostumbrados ni tenemos la técnica sufríamos bajando a esa profundidad.
Hemos sido los últimos en subirnos al barco porque a decir verdad, nos ha gustado esta parte del tour. A continuación nos han llevado a las islas PhiPhi al comedor comuncal, que comparten todas las empresas de tours y además la mayoría de bungalows de la isla (los que no son resort claro). Comida más internacional que asiática, con unos spaguettis a la boloñesa que estaban muy ricos.
Para esta parada teníamos 1 hora , entre comida y paseo por la isla para comprobar que la zona derribada por el tsunami la han rehabilitado en muy poco tiempo. Aunque también es cierto que hay muchísimos sacos de obra que no han retirado. No se ven muchas medidas de seguridad ,esto es tan plano que como venga otro tsunami lo destrozará todo y a construir de nuevo.
Nos hemos montado en el barco de nuevo y nos han llevado al punto final de nuestro viaje. En el trayecto nos hemos encontrado con un tiburón ballena dado la vuelta, muerto , flotando sobre el mar , desprendiendo un olor que no era precisamente el de las rosas... Le hemos sacado unas fotos (sobre todo el guía que parecía un niño con zapatos nuevos con su funda de cámara acuática). Nos han llevado en dirección a Phuket a una de las islas cercanas, donde nuestro guía decía pescar de crío y donde nos iba a enseñar los secretos de su familia. A decir verdad, ni idea de los secretos de su familia. Pero lo que si nos ha gustado ha sido el snorkel, una zona acordonada con nada de coral, destrozado por el tsunami y el paso de la gente donde los peces se metían entre tus piernas e incluso te mordían pensando que eras comida y otra zona tras la cuerda, de coral altísimo (con solo 20 centímetros entre el coral y el pecho) donde hemos podido nadar con tiburones... O en nuestro caso tiburón porque salimos por nuestra cuenta en vez de con el guía que se había ido por otro lado y acabamos encontrándolos a 70 metros de la playa. Ellos han visto dos tiburones uno de 2.5m y otro de 1.5m aunque nosotros sólo hemos visto el de 1.5m
De hecho, Bruno lo vio primero pero yo que iba rezagado me lo perdí y como no me quería ir sin nadar con un tiburón me fui un poco hacia atrás y ahi que me lo encontré , no iba muy rápido asi que me dio la oportunidad de seguirlo un buen rato. La experiencia estuvo muy bien, verle ahí delante , moviéndose tan tranquilo, de lado a lado... También nos gustaron bastante los peces flauta que tiene unos colores muy brillantes y son muy alargados y Bruno vio uno que saltaba del agua, pegaba unos saltos como Jesse Owens. Vimos peces payaso, doris, globo, de todo, había muchas especies pero nosotros tampoco es que seamos expertos para deciros los nombres.
Después de nadar nos sirvieron unas frutas y bebidas en la playa (que también explotaban a pachas todas las compañías y en la que , como no , te cobraban por hacer uso de las sombrillas). Tras pasar una lluvia monzónica que nos dejó bonitos , nos fuimos de vuelta a Phuket.
Una vez amarramos nos montamos cada uno en nuestro transporte, el nuestro era un fenómeno de dientes salidos que no paraba de mirar a las chicas mientras conducía y poner caras tontas, o es que directamente era tonto que es más probable. Fuimos los últimos a los que dejó (esta vez era una furgoneta , no un coche) y cuando llegó a la rampa que sube a nuestro hotel nos quería dejar allí con la excusa de que no podía subirla. Si claro, le dijimos, como si en primera no la pudiera subir, que gastara un poco el coche y que se dejara de tonterías. El tío nos puso cara de , me estáis matando, pero acabó subiéndola. Eso sí, le costó las de dioses cristo y si en vez de 3 fuéramos 5 no la habría subido.
Después de un día tan ocupado nos pusimos a ver unas series que nos habíamos bajado del torrent y nos quedamos dormidos en nada pensando ya en dejar Phuket y encontrarnos con Rafa y Meli mañana.

miércoles, 16 de julio de 2008

Dia 23: Phuket

El monzón ha llegado.
Hoy se ha pasado todo el día lloviendo, sin parar... Bueno, de vez en cuando ha parado, pero para enganchar con más fuerza. Que pereza, no ha habido ganas de hacer nada, era un caer y no parar y si véis el video de youtube se ha montado un río en una de las laderas de nuestro hotel que para que.
Hemos "aprovechado" el día sin moto para comprobar cosas de Bali, investigar sobre los hoteles, cosas para hacer, hablar con la gente a la que le teníamos perdida un poco la pista, ponernos un poco al día con el blog, etc...
No hay mucho que contar entonces, salvo que el dueño de nuestro hotel , a pachas con su novia thai, ha llamado por nosotros a un tour de su confianza, que nos ha organizado el mismo tour que habíamos decidido tomar por el mismo precio que la chica de otra agencia nos daba y que nos decía que era un precio especial que sólo ella podía dar y que no le contáramos a nadie. Esta chica también le ha dicho a nuestro casero lo mismo, que no era un precio que se pudiera contar, que era muy especial y que si nos preguntaban dijéramos que nos había costado 2000B en vez de 1500B.
Esto de los tours tiene delito, las agencias trabajan con las mismas compañías, con lo cual obtienen todas los mismos precios base, tienen entonces un margen de al menos el 30% para decidir capturar al cliente. Las compañías que realmente fletan los barcos son las que piden que no se baje de un mínimo para no hundir el mercado.
La diferencia entre un tour y otro es, como ya he comentado, la gente que va en cada uno. Uno barato será en un barco con mucha gente con lo cual se irá "en teoría" más incómodo y "en teoría" los servicios serán más incómodos.
Nuestro casero también nos ha explicado que si vamos a Bali con amigos (Rafa y Meli) podemos sacar el título allí ya que nos harán un grupo especial para nosotros probablemente, nos saldrá más barato y además será más cómodo. Eso sí, nos perderemos sacarlo en Phuket que dicen que es uno de los tres mejores sitios del mundo para bucear. También nos ha explicado un poco las diferencias entre los dos títulos de buceo en Open Water (vamos de bucear en el mar de toda la vida). Uno de ellos es más técnico y está más reconocido además en teoría se da en unas condiciones que el otro no. Además luego si tienes ese título no te pondrán problemas en ningún lado. La diferencia de precio entre uno y otro parece estar en un 30% a mayores.

Pero sobre ésto , mejor comentarlo mañana cuando hayamos vuelto.

martes, 15 de julio de 2008

Dia 22: Phuket

Otra mañana más en el paraíso, otro dia que nos levantamos a las 7 de la mañana, cuando no hay nadie en recepción. Nos hemos tomado algo más liviano ya que ayer nos hemos pasado tela marinera.
Hemos empezado el día bajando a la playa de Kata Beach, hemos estado un rato, un par de bañitos y nos hemos ido hacia el sur de la isla, bordeando la costa. Primero hemos parado en el viewpoint desde donde se ven las dos playas de Kata y la isla. También se ve Karon Beach. a continuación siguiendo por la costa hemos bajado hasta la playa de Nai Harn, eso sí antes hemos parado en el mirador de Cape Phorntep. Desde aquí se tiene una visión de los dos lados de la isla, en un día claro como el de hoy se puede ver el mar varios kilómetros en adelante. En este sitio hay un restaurante enorme, un montón de puestos de ropa y un mirador con un faro y un monumento en honor de los 26 hijos del antiguo rey de Tailandia que resultó ser un excelente almirante marino. El faro es en realidad un tributo a la gente fallecida en el Tsunami. En esta explanada también hay una especie de museo al aire libre al elefante , con un altar a Buda y múltiples elefantes. Como no , no puede faltar un vendedor para colocarte cualquiera de las figuras de artesanía, incluidos los elefantes más enormes que para llevarlos necesitaríamos un container en un barco como mínimo.
Siguiendo hacia el sur hemos pasado por otra de las playas "privadas" donde no se aglutinan turistas como en la de Patong. Es una playa también muy recogida , tipo huevo, donde hay un templo, el más grande de la isla que es el que hace que no construyan resorts, ya que por la existencia del templo a su alrededor , en un radio bastante grande , no se puede construir.
La playa está bien, agreste, como todas en Phuket , no tiene servicios y la bandera es siempre roja de peligro. El mar es bravío y las olas son superdivertidas. Hoy había olas de hasta 2 o 2.5 metros que eran geniales para dejarte llevar, también serían decentes para surfear supongo. Hemos estado un par de horitas, eso sí, yo no me he quitado la camiseta y me he puesto una toalla para cubrirme los brazos y la cara y no quemarme. El sol aquí pega de lo lindo y mejor protegerse, que ni con crema de factor 50 para niños te salvas.
Un poco aburridos de playa nos hemos dirigido de nuevo hacia el sur, pasando por la estación de energía alternativa, un molino de viento que no creo que tenga baterías para dar mucha alternativa, la verdad. Al lado de la estación había un paisano, metido bajo un cobertizo esperando a ver si subía por esta rampa que no sale en ningún mapa algún tursita despistado y le pudiera colocar algo. A nosotros no nos ha colocado nada, pero vamos, que no le veo yo mucho futuro a su negocio ahí arriba. desde aquí hemos podido ver una playa salvaje donde se puede hacer snorkling, además había un buzo en su lancha. El agua estaba totalmente cristalina y no había apenas gente.
Siguiendo hacia el sur hemos llegado a la playa que ponían como excelente, pero que ha resultado ser un muelle para todos los long boats (barcos de madera que se alquilan por días para desplazarte a los islotes de los alrededores) y un poblado de pescadores donde apenas hay aslfatado o acondicionamiento de la zona. Como esto no nos ha llamado la atención hemos seguido (ya pasado el pico de la isla esta vez subíamos hacia Phuket) y nos hemos acercado a Patong, donde hemos leido que hay un Carrefour para hacer más compras y luego ya, irnos al hotel.
Después de localizar el Carrefour (y nos ha costado lo nuestro porque en Patong hay dos calles principales, de comercios, una en un sentido y otra en el otro y si no atinabas tenías que recorrerte una completa de nuevo para poder volver a buscarla) hemos hecho unas compras bastante completitas. Por fin hemos comprado pan, un par de baguettes a precio europeo, unos bollos (que estaban riquísimos) y comida cocinada en el Carrefour que , salvo por una deshonrosa excepción, estaba bastante rica.
En el CC además del Carrefour había un PowerBuy (la cadena de tecnología más grande de Tailandia) que no nos ha llamado la atención, una cine con sección de karaoke y maquinitas y luego muchas zonas de masajes para los guiris y las "novias" de los extranjeros. Las "novias" también tienen aqui ocasión de gastar un poco del dinero de sus acompañantes mientras ellos leen tranquilamente algo fuera.
En el supermercado, hemos experimentado otra vez el fenómeno novia en su máxima expresión. Montones de guiris con sus respectivas haciendo compras de comida (las deben tener en los apartamentos), algunos con sus niños (alguna que los habría cazado o en su defecto el amor que habría podido triunfar).
Nos hemos ido al hotel y antes hemos bajado un rato a Kata buscando entre los distintos tours para ir a las islas. Las ofertas iban desde los 1100B hasta los 3500B. La diferencia estriba en la cantidad de gente que va en cada barco, la velocidad de éste y el tiempo que se puede pasar en cada sitio o a qué hora se llega a cada sitio. Después de dar un paseo nos decidimos por uno de 1500B que tenía buena pinta asíque le dijimos a la chica que íbamos a ver como era en el hotel y que luego bajábamos a contratarlo.
El problema es que subimos al hotel pero después cayó la del pulpo, el monzón en todo su esplendor y claro, cero ganas de bajar a ningún lado, con lo cual nos quedamos en la habitación. Además ponía en windgurú y en otros sitios web de tiempo que iba a llover todo el día siguiente.


El detalle: Mientras íbamos por una de las calles uno de los ladyboys nos ha hecho señas para que entrásemos en su negocio , JA JA JA. No entro yo ahi ni loco.
El fenómeno: ¿Por qué siempre hay un negociante fenómeno? Aparcamos las motos cada uno enfrente de un sitio de tours, entre medias un hindú que me quería hacer unos trajes, hablamos con los dos y el fenómeno dijo que como había visto que mi amigo había entrado en la tienda que le diera yo precio, que a él no le gustaban los que regateaban (coño, el primero que vemos) y que nos daba el precio puesto en el folleto que me ofrecía como bueno. Claro , voy a pagarte el doble de lo que me piden los demás por tu cara bonita, hasta luego lucas.
La graciosa: Mientras estábamos en uno de los tours vino una "trabajadora" de uno de los bares que están por todas partes a intentar que la contrataran... Realmente no era graciosa...

lunes, 14 de julio de 2008

Dia 21: Phuket

Nos levantamos tempranito, a las 7 de la mañana para aprovechar el día , que por culpa de la estación en la que estamos (invierno) dura desde las 7 am hasta las 6pm , es decir, 13 horas de luz. Subimos a recepción/lobby/restaurante donde nos tomamos un rico desayuno con vistas a la playa. Tuvimos suerte, hacía buen tiempo. Estuvimos hablando un rato con el recepcionista/camarero que muy atentamente te servía cada vez que te faltaba algo y te hacía refilling del café cada dos por tres.
El desayuno se componía de frutas (algo parecido a la piña, con la forma de la piña , pero con menos sabor que la piña), otros frutos que parecen castañas por el envoltorio pero que luego por dentro traen algo así como lichis, otro tipo de cítrico verde por fuera pero dulzón por dentro y sobre todo croissants...
Cogimos las motos, no sin que antes el manager del hotel (que no el dueño) nos preguntara por cuanto nos habían salido, le dijimos que por 150B , él nos había ofrecido el mismo modelo por 200B. Supongo que no le gustó mucho que la moto no la cogiéramos con el hote, pero que se le va a hacer. Cogimos una guía de Singapur de la biblioteca y nos dirigimos a la playa. Nos fuimos hasta Kata Beach, una de las dos que nos quedan más cerca del hotel. No está mal, es recogido, un poco hervidero y tiene muy poca gente. Hay tres resorts a pie de playa y para de contar. Eso sí, tienen la torre para prevención del tsunami, un salvavidas que nunca estaba en su torre sino hablando con los que alquilaban las hamacas y por suerte no tiene entretenimiento extra para turistas ,con lo cual te libras del ruido de las motos de agua , de los botes salchicha o de las motoras con paracaidas.
Después de estar un rato en esta playa cogimos las motos y nos acercamos a otra distinta. Ésta era más abierta, con más gente y sobre todo mucho surfista. Como nosotros no hacemos surf y tampoco es plan de que te revienten la cabeza con la quilla de la tabla, nos fuimos a otra playa que para eso estamos motorizados.
Estamos haciendo unas reviews de las playas, con sus videos, su accesibilidad, el tipo de gente que las visita , etc...
Nos subimos arriba al hotel a comer por eso de hacer algún tipo de gasto y de paso probar su comida , porque claro si la habitación es tan barata y nosotros no tomamos nada del bar ni del restaurante flaco favor le estamos haciendo. Además si tenemos en cuenta que nos dieron dos cupones con 20% de descuento en cada comida, pues se nos dió por utilizarlos. Nos pedimos un arroz con pollo y un pad thai. Los dos muy ricos y en grandes cantidades, eso sí, tardaron un buen rato en traerlos.
Después de comer, duchita y a la misma playa del principio. Estuvimos hasta tarde ,cuando ya apenas quedaba nadie, sólo un par de fenómenos con sus "novias", un par de fenómenos con sus novios y finalmente una pareja que llegó y convirtió la playa en su plató de fotografía. Supongo que serían del alguna web tipo teen porque ella era muy joven, parecía una niña y llegó en topless, posando con posturas muy tontas, saltando , rebozándose en la arena... todo muy típico. A la actuación de la pareja asistía una familia francesa para regocijo de los niños pequeños y cabreo de los padres, que no querían que estuvieran fijándose tanto.
Como ya se hacía de noche decidimos irnos al hotel a dormir que al día siguiente era nuestra intención hacer el tour de verano azul pero esta vez con la cámara. Nos hemos vuelto al hotel a descansar y a prepararnos para cambiarde hotel ya que no hemos podido prolongar nuestra estancia en éste , con todo completo.

domingo, 13 de julio de 2008

Dia 20: Phuket

Nos levantamos a las 7.30 como casi siempre. Nos fuimos a desayunar al CC Blooms que queda a 100 metros de nuestro hotel. El desayuno estaba bastante bien, frutas frescas, zumos , tostadas, croissants , cafés y tés. Nada de comida caliente pero está genial porque el hotel también da al mar y se puede desayunar viendo el mar y las palmeras pero desde la colina.
Ahora os voy a comentar la peculiaridad de este hotel. Es un hotel gay friendly, el dueño del hotel es gay, todos los empleados son gay e incluso la única empleada yo diría que es transexual o sino es una mujer muy fuerte...
Como el check-in hasta las 11:30 no se podía hacer cogimos las motos y nos fuimos a la playa a pasar la mañana. Dejamos todo lo que habíamos comprado en una de las neveras de recepción y luego ya dijeron ellos que pasarían las mochilas y la comida a la nevera de nuestra habitación.
Después de estar en la playa y volver camarón, camarón, por culpa de nuevo de la crema Lantern (que para mi que en vez de ser factor protección 35 es factor pontenciador 35). El tema es que hablando con el de recepción chino nos dijo que era una copia de Lancome, claro... Y se vendía en un supermercado oficial y grande, no en un chiringuito escondido o con pinta de trabajar con mercancías piratas.
Después de estar en la playa (recordad que podéis ver los videos en youtube o las fotos en picasa) nos fuimos al hotel y vimos que nos habían puesto en una habitación de la primera planta sobre la piscina y que era una cama de matrimonio. Los fenómenos nos habían confundido con una pareja gay, suele pasar cuando dos hombres viajan solos por Tailandia y van a un hotel para gays claro. Detalles de la habitación: limpia, bonita, con nevera pequeña y microondas y para dar la nota alegre, crema lubricante, condones y tissues a tutiplen. Ahora a hacer las coñitas que queráis pero el hotel es superbarato con muchos servicios y las habitaciones no están nada mal.
En cuanto a la segunda habitación que cogimos era de tamaño de suite, bastante grande , con una cama de 2m20 que luego separaron en 2 camas de 1m10. La TV con 19 canales y una nevera de tamaño enorme. Eso si, nos econtramos con un problema con nuestra habitación, aparecían cucarachas a gogó. Fuimos a buscar al de recepción que vino con su zapatilla , pensando que sólo sería una, pero luego aparecían más y más... el chino de recepción llamó a los ingenieros (vamos a la gente de mantenimiento) y en un pis pas aparecieron 5 empleados buscando de donde venían las cucarachas. Tened en cuenta que estamos en el medio de la jungla y que los bichos no son tan raros. Nos volvimos a marchar a hacer una ruta turística en moto (imaginad la musiquita de Verano Azul de fondo porque es tal cual) y fuimos recorriendo las playas de la isla para conocerlas y ver lo mejor de cada sitio. También pasamos por los miradores y por otras zonas de interés turístico (de las pocas que hay en Phuket que está más orientada a la playa y al turismo ...). A la vuelta nos comentaron cual había sido el problema. Hasta los hoteles de la montaña no llegan canalizaciones, son canalizaciones propias de desagües y también hay depósitos de agua para las traídas y resultó que había una holgura en el desagüe y se estaban metiendo por ahí, lo solventaron con silicona.
De esta experiencia lo más gracioso fue ver a uno de los empleados con los morros pintados con pintalabios rojo a la búsqueda del enemigo o a la susodicha empleada femenina con cara de matar bichos...
Ese día comimos en un McDonalds en Patong, por esto de comprobar nuestra teoría de McDonalds, y la comida con bebidas nos salió por 360B que son 6€, un auténtico robo para turistas... Toda la zona tiene los precios inflados y tenéis en la misma calle Subway , Starbucks , Burguer King , McDonalds... No recomendable para el futuro, asi que los que vais a venir por aquí ya sabéis , pasando de Patong que es gerundio.
Despues por la noche volvimos a nuestro hotel y nos deleitamos con unos noodles de los del supermercado, estaban muy ricos pero a Bruno le tocaron unos picantes que por poco no le matan. Es el problema de que no traduzcan las etiquetas, claro, en tailandés a ver quien se entera de lo que dicen y si no hay nadie cerca para preguntar no te enteras de si estás pillando spicy o no.